Imagínate una cacerola llena de agua fría en la cual nada tranquilamente una pequeña ranita.
Un pequeño fuego se enciende bajo la cacerola, y el agua se calienta lentamente.
El agua despacio, despacio se va poniendo tibia, y la ranita encuentra esto más bien agradable, y continúa nadando.
La temperatura del agua sigue subiendo...
Ahora el agua está caliente, más de lo que la ranita pueda gozar, se siente un poco cansada pero no obstante eso no se asusta.
Ahora el agua está caliente, más de lo que la ranita pueda gozar, se siente un poco cansada pero no obstante eso no se asusta.
Ahora el agua está verdaderamente
caliente y la ranita comienza a encontrar esto desagradable, pero esta
muy debilitada, entonces soporta y no hace nada.
La temperatura continúa subiendo, hasta cuando la ranita termina simplemente... cocinándose y muriendo.
Si la misma ranita hubiera estado
metida directamente en el agua a 50 grados, con un golpe de sus patas
inmediatamente habría saltado fuera de la cacerola.
Esto demuestra que, cuando un cambio
viene de un modo suficientemente lento escapa a la conciencia, y no
provoca en la mayor parte de los casos ninguna reacción, ninguna
oposición, ninguna revuelta…
Si miramos lo que sucede en nuestra
sociedad desde hace algunas décadas, podemos ver que estamos sufriendo
una lenta deriva a la cual nos estamos habituando.
Una cantidad de cosas que nos habrían
hecho horrorizar 20, 30 o 40 años atrás han sido poco a poco
banalizadas, y hoy preocupan apenas, o dejan directa y completamente
indiferente a la mayor parte de las personas.
En nombre del progreso, de la ciencia,
y del aprovechamiento, se efectúan continuos ataques a las libertades
individuales, a la dignidad, a la integridad de la naturaleza, a la
belleza y a la felicidad de vivir.
Lentamente, pero inexorablemente, con la constante complicidad de las víctimas, inconscientes, o quizás incapaces de defenderse.
Las negras previsiones para nuestro
futuro en vez de suscitar reacciones y medidas preventivas, no hacen más
que preparar psicológicamente a la gente para aceptar las condiciones
de vida decadentes, y también dramáticas.
El martilleo continuo de informaciones
por parte de los medios satura los cerebros, que no están ya en
condiciones de distinguir las cosas.
Cuando hablé de esto por primera vez, era pensando en el mañana...
Cuando hablé de esto por primera vez, era pensando en el mañana...
¡¡¡ Ahora es para HOY !!!
Entonces, si no estás como la ranita ya medio cocinad@, da un saludable golpe con tus patas ¡antes que sea demasiado tarde!
ESTAMOS MEDIO COCINADOS, ¿ O NO ?
Me gusta cómo está quedando este blog :)) Y esa sirena de fondo me ha recordado a una peli "pintada a mano" que descubrí hace unas cuantas noches en tve2: "De profundis" se titula.
ResponderEliminarhttp://www.deprofundislapelicula.com/
http://www.youtube.com/watch?v=vyhakiu4ftE
Besos inmersos en la belleza que palpita cada día ;*)
Y este otro viodeclip de la peli también me ha gustado bastante, bastante ^^
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=l5NkIRakLBU&feature=related
Por si lo quieres subir a otro blog que yo me sé ;) Buajajá!
Buajajá, jijijijijijiji, que gracia. Me alegris que te este gustandi
ResponderEliminarHay tantos fondos para poner............. jorrrrrrrrrrrrr
Vere todo los enlaces que me has puesto
Delibérame *-*